Justicia para unas nalgas. Para los niños de Sonora, olvido
Justicia para unas nalgas. Para los niños de Sonora, olvido Recientemente a una roquera famosa la perjudicaron en codiciada parte de su anatomía. En México sólo tres leyes se cumplen cabalmente: la Ley de Herodes, la Ley del Embudo y la Ley de Gravedad. Pues bien, esta tercera ley había cumplido sus efectos, y el prominente trasero de la cantante Alejandra Guzmán empezaba a mirar al suelo. Entonces la roquera acudió a una clínica en la que le inyectaron una sustancia extraña, con la promesa de que aquella parte luciría “¡eternamente bella, bella, con un hechizo de gitana!”. El resto de la historia es bastante conocido: en lugar de erguirse orgulloso, aquello tomó la forma de un paisaje lunar. Ya no sólo el trasero, la vida misma de la cantante estuvo en serio peligro. Entró en acción la justicia. Inmediatamente fue detenida la dueña de la clínica. Después de una intensa búsqueda, el doctor que practicó las inyecciones fue apresado. Luego fueron detenidos ocho empleados de la empres...