Tres razones por la que NO deberíamos casarnos "por amor"
Las parejas que NO se casan por amor en nuestra cultura son
consideradas como personas con mala suerte, sospechosas, manipuladoras,
explotadoras y malvadas. Solemos pensar que, o están haciendo cosas
malas o hay algo que tienen mal en su cabeza. Nos hacen sentir cualquier
otra cosa menos simpatía porque a la mayoría de nosotros nos enseñaron
que el amor es la única razón "correcta" para unirse en pareja.
Sin embargo si realmente piensas con detenimiento el amor es un lujo. Cuando uno se casa por amor, por lo general significa que tiene todas -o al menos la mayoría- de sus otras necesidades cubiertas (como casa, comida, sustento, etc.). Esto quizá puede explicar por que las personas con menos recursos económicos tienen también las tasas de matrimonio más bajas. Si está preocupado acerca de su supervivencia o su seguridad, nadie se va a centrar en encontrar al hombre o la mujer de sus sueños, a menos que, por supuesto, esta persona de sus sueños sea su boleto para salir de vivir en un hogar terrible, o tener un lúgubre panorama financiero, o salir de la espeluznante "soltería".
La procreación siempre ha sido el factor por que las personas se casan, pero hasta hace unos 200 años más o menos, la gente en occidente se casaba mas por intereses políticos o financieros que por amor.
La era victoriana y la Revolución Industrial (1800) crearon dos cambios importantes en el modo de vida de las personas. Como consecuencia el romance se puso de moda y los avances tecnológicos logrados hicieron la vida mucho más fácil. Antes de estos acontecimientos el divorcio era increíblemente raro, pero cuando el amor entró en escena, como la razón para casarse, las disoluciones se convirtieron en algo común.
Los Derechos de la Mujer, las leyes de divorcio sin penalizaciones y el mayor énfasis en la búsqueda de la felicidad personal en los años 70's, abrió la puerta a mayores posibilidades de elección y, por lo tanto, más divorcios. Las tasas de divorcio se dispararon hasta un 50% (frente al 11% en el años cincuenta) y no han cambiado mucho en los últimos 50 años.
Hemos recorrido un largo camino con la tecnología y la vida moderna, pero ¿hemos hecho llegar demasiado lejos en nuestra cultura al amor centrado en lo conyugal?
Lo que los expertos como Andrew Cherlin ("Marriage Go-Round") y Stephanie Coontz ("Matrimonio, su historia") nos dicen es que, en nuestro intento de hacer la institución del matrimonio más fuerte, haciendo elevar el nivel para cumplir con nuestras altas necesidades de amor y romance, lo hemos debilitado seriamente. El matrimonio así se sustenta con dos emociones muy cambiantes: cuando el amor se desvanece el matrimonio se pone inestable, cuando el romance para, las nupcias mueren.
Para las personas cuya principal razón para casarse no es el amor, como tener hijos con alguien que creen que sería un buen compañero para la crianza, tener una seguridad financiera, o de compañía, por lo general duran más tiempo y quizás tienen mejores matrimonios ya que sus decisiones son tomadas con un propósito definido. Además, sus expectativas sobre el matrimonio y su pareja son mas realistas, su cónyuge no esperaba que fuera "el príncipe o la princesa", y sólo tenía que ser el señor o la señora "suficientemente bueno".
Algunas personas llaman a esto conformismo, pero estamos viendo lo exitosos que son los matrimonios como estos cada vez más.
No estoy diciendo que el amor no debe estar en la lista de cosas que deben estar en su relación, sino que el amor no tiene que estar en el primer lugar (y tal vez no debería ocupar ese sitio).
A continuación pongo las tres razones por las que pienso que "casarse por amor" no es algo inteligente:
1. El amor es una emoción cambiante. Tan pronto como uno se enamora, puede uno desenamorarse. ¿Entonces qué? O bien la relación termina o se vuelve tóxica. Si el amor es la conexión principal, entonces el pegamento se ha ido.
2. El amor no es un cimiento lo suficientemente fuerte. Sí, el amor es fuerte, pero debido al hecho de que se puede evaporar, no es algo con lo que solo se puede tener como la base para una relación a largo plazo (especialmente cuando hay niños involucrados). Cualquier cosa construida sobre unos cimientos de amor está sujeta a caer con un ligero sismo.
3. El amor está lejos de ser "todo lo que necesitas" (como la canción de The Beatles, "All you need is love"). En realidad necesitas tener: respeto mutuo, objetivos compartidos y compatibilidad para tener una relación sostenible duradera a largo plazo. Las personas se suelen "enamorar del amor" porque piensan que todos queremos ser queridos, nos encanta el amor y lo queremos para toda la vida. Sin embargo, si usted quiere una receta para una relación fuerte y saludable, podría tener este aspecto: 1 Copa de respeto mutuo, 1 Copa de compartir metas, 3 Copas de compatibilidad, 1 cucharada de amor, 1 cucharada de atracción.
¿Y tu que piensas?
Sin embargo si realmente piensas con detenimiento el amor es un lujo. Cuando uno se casa por amor, por lo general significa que tiene todas -o al menos la mayoría- de sus otras necesidades cubiertas (como casa, comida, sustento, etc.). Esto quizá puede explicar por que las personas con menos recursos económicos tienen también las tasas de matrimonio más bajas. Si está preocupado acerca de su supervivencia o su seguridad, nadie se va a centrar en encontrar al hombre o la mujer de sus sueños, a menos que, por supuesto, esta persona de sus sueños sea su boleto para salir de vivir en un hogar terrible, o tener un lúgubre panorama financiero, o salir de la espeluznante "soltería".
La procreación siempre ha sido el factor por que las personas se casan, pero hasta hace unos 200 años más o menos, la gente en occidente se casaba mas por intereses políticos o financieros que por amor.
La era victoriana y la Revolución Industrial (1800) crearon dos cambios importantes en el modo de vida de las personas. Como consecuencia el romance se puso de moda y los avances tecnológicos logrados hicieron la vida mucho más fácil. Antes de estos acontecimientos el divorcio era increíblemente raro, pero cuando el amor entró en escena, como la razón para casarse, las disoluciones se convirtieron en algo común.
Los Derechos de la Mujer, las leyes de divorcio sin penalizaciones y el mayor énfasis en la búsqueda de la felicidad personal en los años 70's, abrió la puerta a mayores posibilidades de elección y, por lo tanto, más divorcios. Las tasas de divorcio se dispararon hasta un 50% (frente al 11% en el años cincuenta) y no han cambiado mucho en los últimos 50 años.
Hemos recorrido un largo camino con la tecnología y la vida moderna, pero ¿hemos hecho llegar demasiado lejos en nuestra cultura al amor centrado en lo conyugal?
Lo que los expertos como Andrew Cherlin ("Marriage Go-Round") y Stephanie Coontz ("Matrimonio, su historia") nos dicen es que, en nuestro intento de hacer la institución del matrimonio más fuerte, haciendo elevar el nivel para cumplir con nuestras altas necesidades de amor y romance, lo hemos debilitado seriamente. El matrimonio así se sustenta con dos emociones muy cambiantes: cuando el amor se desvanece el matrimonio se pone inestable, cuando el romance para, las nupcias mueren.
Para las personas cuya principal razón para casarse no es el amor, como tener hijos con alguien que creen que sería un buen compañero para la crianza, tener una seguridad financiera, o de compañía, por lo general duran más tiempo y quizás tienen mejores matrimonios ya que sus decisiones son tomadas con un propósito definido. Además, sus expectativas sobre el matrimonio y su pareja son mas realistas, su cónyuge no esperaba que fuera "el príncipe o la princesa", y sólo tenía que ser el señor o la señora "suficientemente bueno".
Algunas personas llaman a esto conformismo, pero estamos viendo lo exitosos que son los matrimonios como estos cada vez más.
No estoy diciendo que el amor no debe estar en la lista de cosas que deben estar en su relación, sino que el amor no tiene que estar en el primer lugar (y tal vez no debería ocupar ese sitio).
A continuación pongo las tres razones por las que pienso que "casarse por amor" no es algo inteligente:
1. El amor es una emoción cambiante. Tan pronto como uno se enamora, puede uno desenamorarse. ¿Entonces qué? O bien la relación termina o se vuelve tóxica. Si el amor es la conexión principal, entonces el pegamento se ha ido.
2. El amor no es un cimiento lo suficientemente fuerte. Sí, el amor es fuerte, pero debido al hecho de que se puede evaporar, no es algo con lo que solo se puede tener como la base para una relación a largo plazo (especialmente cuando hay niños involucrados). Cualquier cosa construida sobre unos cimientos de amor está sujeta a caer con un ligero sismo.
3. El amor está lejos de ser "todo lo que necesitas" (como la canción de The Beatles, "All you need is love"). En realidad necesitas tener: respeto mutuo, objetivos compartidos y compatibilidad para tener una relación sostenible duradera a largo plazo. Las personas se suelen "enamorar del amor" porque piensan que todos queremos ser queridos, nos encanta el amor y lo queremos para toda la vida. Sin embargo, si usted quiere una receta para una relación fuerte y saludable, podría tener este aspecto: 1 Copa de respeto mutuo, 1 Copa de compartir metas, 3 Copas de compatibilidad, 1 cucharada de amor, 1 cucharada de atracción.
¿Y tu que piensas?
De acuerdo con los ingredientes de la receta, pero y como me irá si en el super se agotó la "copa de compartir metas" y solo había "copa y media de compatibilidad?
ResponderEliminarlittle frog.